Las principales autoridades portuarias son conscientes de que el ferrocarril es un modo para proyectar la conectividad de la comunidad portuaria con el interior de su hinterland y se están lanzando a desarrollar infraestructuras y conexiones, tanto para los tráficos de contenedores como para graneles, mercancías peligrosas y vehículos terminados, entre otros productos.
En este contexto, tras Barcelona o Tarragona, la Autoridad Portuaria de Valencia baraja el establecimiento de una plataforma logística intermodal apoyada en las infraestructuras ferroviarias existentes al este de Madrid y en el eje de la M-21, limitando con el término municipal de Coslada, en un entorno con la mayor concentración de actividad logística del centro de la península ibérica.
Como paso previo, la Autoridad Portuaria de Valencia nos encargó los trabajos de asistencia técnica para la realización de un estudio previo analizando los condicionantes para el establecimiento de esta futura plataforma logística. El estudio incluyó un análisis de alternativas viables para la plataforma de intercambio logístico ferroviario-viario, así como la relación con la existente terminal de contenedores de ADIF en Vicalvaro.
El puerto de Valencia busca una ubicación preferente en Madrid, entre el puerto seco de Madrid, en Coslada, y la terminal ferroviaria de mercancías de Vicálvaro, con buenas conexiones tanto con la M-40 y la M-45, como con la A-3, que une Madrid con Valencia, y la A-2, que una la capital con Zaragoza y Barcelona.
El trabajo fue realizado en colaboración con el Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos Jesús Azpeitia Calvín.